Cuando era pequeño y soñaba que volaba lo hacia como nadando, muy
mal, me daba cuenta hasta yo que mi estilo no era muy bueno. Lo curioso
es que con los años he ido puliendo mi técnica sin darme cuenta hasta
que hace unos días me fijé que lo hacia sin pensar. Podia subir metros y
metros y luego ir planeando a donde quisiera, se convirtió en algo muy
natural.
No se, me hizo bastante gracia pensar que había aprendido a volar soñando.
Qué cortos son tus posts, aunque también poéticos.
ResponderEliminar